Agentes de la Policía Municipal de Pamplona tuvieron que perseguir este sábado a un conductor que hizo caso omiso a las advertencias de una patrulla. Los hechos ocurrieron en la madrugada del sábado 15 de febrero, a las 4:20 horas, cuando una patrulla de la Policía Municipal de Pamplona observo a un vehículo que circulaba de manera irregular por la calle Sangüesa. Cuando los agentes se pusieron a la par y le solicitaron que detuviera el coche y descendiera, el conductor huyó derrapando, iniciando una persecución por diversas calles de la ciudad.
El seguimiento se prolongó por Plaza de la Cruz y Avenida de los Fueros, hasta que finalmente los agentes lograron interceptarlo en Sancho el Fuerte. El conductor, un hombre de 32 años, opuso una fuerte resistencia, golpeó a una patrulla y circuló en dirección prohibida.
Además, en la prueba de alcoholemia arrojó un resultado de 0,60 mg/l, lo que supone un delito contra la seguridad vial. Tras su detención, su vehículo fue trasladado al depósito municipal, y dos agentes resultaron lesionados en el forcejeo. Se le imputan delitos de desobediencia, resistencia a la autoridad, daños y conducción bajo los efectos del alcohol.