Con las campanadas del 31 de diciembre entrará en vigor en el Casco Antiguo la obligatoriedad de los locales de hostelería de contar con vestíbulo estanco para el acceso de público, con absorción acústica y dos puertas que, salvo casos justificados, no podrán colocarse enfrentadas. Es una medida para evitar ruido ambiental en la calle y que se recogía en la aprobación definitiva del Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Antiguo (PEPRI). En esa zona de la ciudad hay alrededor de 210 locales de hostelería (bares, cafeterías, restaurantes, bares especiales, etc.).
Aunque la normativa entró en vigor en 2016, tras una tramitación de más de un año, con un proceso participativo en el que se recogieron propuestas de asociaciones de hostelería y comerciantes y de asociaciones vecinales, Disposición Transitoria de esta regulación posponía alguna de las medidas en el tiempo, como es el caso de la doble puerta con vestíbulo estanco. Se recoge en esta disposición que, cuando la construcción del departamento estanco sea incompatible con el grado de protección del local o edificio, o el Ayuntamiento reconozca, excepcionalmente, una especial dificultad, se considerarán otras soluciones que permitan el mayor grado posible de adecuación efectiva, como puedan ser las relativas al horario de funcionamiento o a la ausencia de instalación musical.
Uno de los objetivos de esta modificación del Plan Especial de Protección y Reforma Interior del Casco Antiguo era mejorar la convivencia equilibrada en el barrio, de acuerdo a sus características y escala física, entre el comercio, hostelería y vivienda, de forma que se asegure la pervivencia de los valores patrimoniales y urbanos y reducir las molestias por ruidos y suciedad.
Cuándo se volvieron a tramitar licencias
En la modificación del PEPRI se establecieron una serie de medidas específicas para las actividades de hostelería entre las que se regulaban superficies máximas, distancias entre establecimientos, superficie útil de público destinada de manera permanente a mesas y sillas, además de otras de carácter constructivo, como la instalación de limitador-registrador musical o el departamento estanco con absorción acústica.
Simultáneamente, esta normativa reactivaba la tramitación de licencias de hostelería en el Casco Antiguo, al entender el ámbito regulado y por tanto, establecido el sistema para evitar colisión de derechos. La tramitación de nuevos establecimientos en esa zona de la ciudad había estado paralizada desde el 20 de agosto de 2015
La Disposición Transitoria difería algunas medidas en el tiempo, como la obligación de que en cafeterías al menos el 50% de la superficie útil de público se destinase de manera permanente a zona de mesas y sillas, que entró en vigor el 1 de enero de 2020 y la de la doble puerta que entra en vigor el 1 de enero.
El Ayuntamiento ya ha exigido el cumplimiento de la norma a todos los locales abiertos desde la aprobación del PEPRI (bares, bares especiales y cafés espectáculos, discotecas y salas de fiestas y cafeterías, no así restaurantes, que no está obligados) y los que han hecho alguna reforma desde entonces. También los bares especiales, para tener la consideración de tales, han debido contar con vestíbulo estanco, lo mismo que discotecas y salas de fiestas.