Joaquín Almunia, vicepresidente de la Comisión Europea entre 2010 y 2014, aseguró este lunes que la Unión Europea necesita revisar su modelo de financiación, basado en contribuciones de los Estados miembros basándose en su PIB. El político español recomendó a la UE “introducir impuestos europeos y endeudarse en mayor medida” para acometer con éxito su prevista ampliación. Almunia participó en una mesa redonda sobre la ampliación europea junto a Frans van Daele, ministro de Estado de Bélgica, y Borja Lasheras, asesor y miembro del gabinete del alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad. Ludger Gruber, presidente de la Fundación Konrad Adenauer en España y Portugal, recogió las conclusiones de los ponentes. El acto se desarrolló en el marco de la jornada inaugural de los VI Cursos Europeos de Verano, que se celebran hasta este miércoles en Pamplona.
“La Unión Europea cambiará con su ampliación”, vaticinó Lasheras. El miembro del gabinete del alto representante de la UE advirtió de que “la historia llama a nuestra puerta” en un momento de apertura de la Unión Europea hacia el este, con países como Ucrania y Moldavia opositando para convertirse en Estados miembros de la Unión. Su éxito podría arrastrar a los territorios balcánicos, apuntó Lasheras, aunque el propio asesor señaló que estos países tienen diferentes lógicas y no siempre caminan en la misma dirección.
Por su parte, Frans van Daele resaltó la necesidad de que las nuevas incorporaciones sirvan al propósito de crear una Unión Europea más fuerte. Así, el ministro de Estado de Bélgica instó a estudiar la conexión entre engrandecer el territorio que abarca la UE y profundizar en la prosperidad de los Estados miembros actuales.
La ampliación europea, no obstante, se prevé complicada si la Unión Europea no incrementa sus fuentes de ingresos, algo que el organismo debe hacer “con o sin ampliación”, en palabras de Almunia. El exvicepresidente de la Comisión Europea solicitó también una mayor protección de los derechos fundamentales y del Estado de derecho, reprochando las políticas de Polonia, en su legislatura anterior, y Hungría, en la actualidad. En caso de no formar parte de la Unión Europea y solicitar su adhesión ahora mismo, el país presidido por el ultraderechista Viktor Orbán “no entraría en la UE por sus problemas con la aplicación del Estado de derecho y de los estándares democráticos”, expuso Almunia.
“El mayor logro del proyecto europeo en décadas”
La mesa redonda estuvo precedida por un discurso de Serhii Ustymenko, ministro consejero de la embajada de Ucrania en España. Ustymenko, representante del país invitado en la VI edición de los Cursos Europeos de Verano, señaló que Ucrania es consciente de que todavía le queda “mucho trabajo por hacer” en el camino a su adhesión en la UE, aunque “está listo para acometer sus tareas domésticas”. El ministro consejero aprovechó su intervención para pedir a Europa que continúe apoyando a Ucrania en su defensa de la agresión rusa, y manifestó que “la asistencia a Ucrania a derrotar al invasor ruso constituiría el mayor logro del proyecto europeo en décadas”.
El conflicto entre Rusia y Ucrania, que este año cumple su undécimo aniversario, es una “guerra existencial”, calificó Ustymenko, quien denunció “las prácticas de terror y los bombardeos de ciudades e infraestructura civil” que Rusia está llevando a cabo. Para detener esta “guerra de desgaste”, el ministro consejero solicitó incrementar la presión sobre Rusia, dado que las sanciones “ralentizan significativamente la maquinaria bélica rusa”.
