Este martes por la mañana, las trabajadoras de la Fundación Gizain, entidad pública encargada de la gestión de los servicios sociales de Navarra, se han concentrado frente a la sede del Departamento de Derechos Sociales en Pamplona para reclamar la equiparación de sus condiciones laborales con las del personal de la administración foral. La convocatoria, impulsada por los sindicatos LAB y CCOO, marca el inicio de un nuevo ciclo de movilizaciones tras la huelga del pasado 26 de noviembre.
El objetivo de estas acciones es visibilizar lo que consideran una situación insostenible. Según denunciaron las representantes sindicales, el convenio de Gizain lleva bloqueado desde principios de 2023, lo que ha perpetuado una brecha laboral entre estas trabajadoras y el resto del personal de la administración. “Es inadmisible que una empresa pública gestionada directamente por el Gobierno de Navarra esté remunerando a trabajadoras por debajo del convenio sectorial de Acción e Intervención Social de Navarra”, señalaron desde LAB y CCOO.
En este contexto, las trabajadoras han anunciado que mantendrán un calendario de movilizaciones quincenales que alternará concentraciones frente al Departamento de Derechos Sociales y los centros de trabajo de Gizain. “Vamos a seguir movilizándonos hasta que se desbloquee esta situación”, aseguraron las portavoces sindicales, quienes también pidieron al Gobierno foral que demuestre su compromiso con la calidad del empleo público.
Además, desde LAB y CCOO subrayaron que la lucha no es únicamente una cuestión salarial, sino también de dignidad laboral y respeto por la labor que realiza este personal en un ámbito tan sensible como los servicios sociales. “No podemos permitir que el Gobierno de Navarra mantenga en precario a quienes trabajan en primera línea atendiendo a las personas más vulnerables”, concluyeron.
La próxima concentración tendrá lugar en dos semanas, con la esperanza de seguir sumando apoyos y mantener su reivindicación en la agenda política y social de Navarra.