Con la llegada de la Semana Grande, los servicios de limpieza de la UTE Donostiako Garbiketa, han dispuesto un dispositivo humano y mecánico para mantener la ciudad limpia en esas jornadas de gran afluencia de personas e intensa actividad festiva.
115 operarios componen el equipo de personal que se afanará en la tarea que se centrará fundamentalmente en Parte Vieja-Centro, Paseo Nuevo-Aldamar, San Martín-San Bartolomé, Muelle, Kursaal-Zurriola-Sagüés.
El concejal de Mantenimiento Urbano, Carlos García, ha señalado que “se implementa estos días un turno de tardes para vaciar papeleras y limpiar la vía pública, además de disponer de dispositivos especiales de limpieza para el Muelle, especialmente con motivo del Abordaje Pirata, y en el entorno de los fuegos artificiales, donde todas las noches se actúa antes y después de cada lanzamiento, rematando la limpieza a la mañana siguiente”.
Para el mantenimiento de la ciudad en las mejores condiciones, se emplea además diversa maquinaria, desde camiones cisterna,baldeadoras, barredoras mecánicas, vehículos hidrolimpiadores, fregadoras, camiones de retirada de residuos, furgón limpiapintadas, aparatos sopladores y carros para el barrido manual.
En diversas zonas, más próximas a recintos festivos de alta afluencia de personas, se emplea también productos desinfectantes y desengrasantes y odorizantes para eliminar los malos olores producidos por orines y vomitonas.
Estos trabajos se llevan a cabo en todo el muro del Paseo Nuevo, en el entorno de Sagüés, alrededores de las iglesias de Santa María y San Vicente, plazas de la Trinidad y Lasala, la mayoría de calles de la Parte Vieja, Muelle, entorno del Teatro Victoria Eugenia, o la escultura homenaje a Fleming. En total, casi 300 litros de desinfectante-odorizante “X-75”.
El recinto pirata dispone de una brigada diaria de 13 personas y 9 elementos mecánicos para su limpieza
FUEGOS ARTIFICIALES
El dispositivo se inicia a las 21.30 horas con el baldeo de las calles adyacentes a la zona de lanzamiento, el regado de los tamarices. Este regado de los árboles de Alderdi Eder se repite al acabar la colección por si pudiera haber algún resto de fuego o carcasas en los mismos.
Ya al día siguiente, desde primera hora se procede a barrer y retirar los restos de carcasas y otros elementos pirotécnicos, baldeando en entorno y volviendo a mojar los tamarices de la zona, que vuelve a prepararse para otra colección.
Al acabar la Semana Grande, casi 20 operarios se afanan en la limpieza de la zona, empleando estropajo y jabón para eliminar restos de las explosiones en la barandilla de La Concha, juegos infantiles de Alderdi Eder y bancos del parque.