PAMPLONA, 11 (EUROPA PRESS)
La secretaria general del PSN, María Chivite, ha criticado la «estrategia rastrera» de la derecha basada en el «ruido interesado» para «tapar» los «avances» del Gobierno de Navarra. Ha hecho un «balance de gestión positivo» de la legislatura y ha asegurado que «no hay alternativa posible para este gobierno».
Así se ha pronunciado en su intervención en el Comité Regional del partido, que ha comenzado el acto recordando la conmemoración del Día Europeo de las Víctimas del Terrorismo y guardando un minuto de silencio. «Este partido ha estado y estará al lado de las víctimas, trabajando con ellas y las entidades que las representan», ha resaltado Chivite, que ha puesto en valor que «hemos llevado sus historias de dolor a las aulas para que prevalezca su memoria».
Un Comité Regional en el que se ha aprobado la lista del PSN al Parlamento de Navarra y más de 50 candidaturas municipales con las que el partido «seguirá siendo un referente local y regional». Todo ello con el objetivo de «ampliar nuestra base social y apoyo», revalidar el Gobierno foral con un «proyecto serio, solvente, ganador, en el que confiar y que ha trabajado para que Navarra siga siendo líder en muchísimas materias».
Chivite ha asegurado que «la desinformación, el ruido y la distorsión son la única estrategia de la derecha con la que intentan tapar los avances de nuestros gobiernos pero también sus propias vergüenzas, como la privatización sanitaria o el recorte de derechos de las mujeres que están haciendo en comunidades como Castilla y León o las distintas tramas de corrupción».
Y ha dicho que «cuando escucho al señor Esparza -presidente de UPN y portavoz de NA+- decir que poco menos que ha llegado al debacle a esta Comunidad, digo yo ‘menudo papelón que está haciendo’, ha arrastrado a su partido a la absoluta irrelevancia política».
A pesar de las «estrategias rastreras», ha llamado a «trabajar por la ciudadanía» porque «tenemos un proyecto que defender y proponer para el conjunto de la ciudadanía». Ha advertido de que, conforme se acerquen las elecciones, la estrategia de la derecha va a ser «subir el tono» y ha remarcado que «no voy a entrar en debates sustentados en mentiras, insultos y falsedades» sino que va a hablar «de proyectos. Que nadie me espere en otra cosa».
Chivite ha asegurado que, a pesar de las complicaciones de la legislatura, el balance de gestión es «positivo» y ha resaltado que el PSN tiene un programa «que demuestra que tenemos proyecto de futuro» apostando por la «calidad de vida», los servicios públicos y el autogobierno.
En este sentido, ha asegurado que «mucha gente se esta acercando porque hemos recuperado la ilusión de la gente» porque «hemos gobernado para todos y todas». Y ha asegurado que «por eso, no hay alternativa posible para este gobierno».
«HEMOS AVANZADO MÁS EN AUTOGOBIERNO QUE TODOS LOS GOBIERNOS DE LA DERECHA»
María Chivite ha destacado que ha sido una semana «muy importante», citando la celebración del 8-M y, muy especialmente, el preacuerdo con el Estado para la transferencia a Navarra de la competencia de tráfico y seguridad vial.
Un «paso histórico, una reivindicación histórica de todos los gobiernos», ha subrayado la socialista, que ha esperado que «ese compromiso se ratifique en la Junta de Transferencias».
Y ha destacado que los actuales gobiernos de España y Navarra «hemos avanzado en autogobierno más que durante todos los gobiernos de la derecha» en la Comunidad foral. «Han hecho muchos discursos sobre autogobierno pero el avance ha venido de la mano del Partido Socialista», ha recalcado.
UNA REFORMA DEL SISTEMA SANITARIO, LA «ASIGNATURA PENDIENTE»
María Chivite ha asegurado que Navarra está «muy bien posicionada» a pesar del contexto actual y de los «agoreros de la derecha». Ha puesto en valor avances como la ampliación de la primera fase del Canal de Navarra y la puesta en marcha de la segunda, el «acelerón» de la inversiones del TAV y la «apuesta fuerte» por los servicios públicos».
Ha admitido que, debido a la pandemia, la «asignatura pendiente» de la legislatura ha sido «la necesaria reforma de nuestro sistema sanitaro» al que, en la crisis sanitaria, se le «han visto las costuras». Y ha incidido en la necesidad de «afrontar de manera global y valiente» esta reforma. Al respecto, ha afirmado que el acuerdo con el sector sanitario «va en la línea» de mejorar las condiciones de los profesionales y sus recursos.
